Una hermosa parte de Morelia
El Callejón del Romance es una pintoresca callesita a tan sólo unos metros del Acueducto y la Fuente de las Tarascas. Con una entrada enmarcada por frondosas camelinas y en el centro del callejón un par de bellas fuentes, es un lugar lleno de tranquilidad.Caminando a lo largo de esta calle podrás leer versos del poema “Romance de mi Ciudad”, de Don Lucas Ortiz, que ostenta en sus muros y por el cual se le dio el nombre de Callejón del Romance.
A este callejón, al que se le conoció primero como “Callejón de la Bolsa” y luego “Del Socialismo” es un reducto típico de la edificación doméstica de Morelia de finales del siglo XIX.
La fisonomía original del callejón era otra; en la entrada había una fábrica de jabón, único inmueble con servicios de agua y electricidad. Las casas eran de adobe con pisos de tierra, techo de dos aguas con vigas, tejamanil y teja, donde vivían los trabajadores de la fábrica.
Al cerrar la fábrica, las casas quedaron abandonadas, hasta que entró el siglo XX, el gobierno Federal las expropió continuando como viviendas arrendadas a particulares, quienes finalmente las adquirieron en propiedad.
En 1965 se remodeló el callejón (su aniversario es el 29 de septiembre), colocando cantera a las fachadas y pisos, instalando las fuentes, farolas, jardinerías, y asignándosele oficialmente el nombre del “Callejón del Romance”. 19 inmuebles del Callejón del Romance se encuentran dentro del catálogo de monumentos históricos de Morelia.
Este callejón es muy pequeño y estrecho, en total tiene 19 edificios con mucha historia. Además es el único callejón de esa zona de la ciudad. Todo esto hace que sea uno de los puntos turísticos más destacados de la ciudad y donde pasean tanto turistas como locales inspirados por las historias de amor relacionadas con esta vía.
Lo primero que se conoce del Callejón del Romance es que fue creado en el el siglo XIX, pero por aquel entonces se llamaba el Callejón de la Bolsa y luego paso a denominarse el Callejón del Socialismo. Era un paso obligado para los vendedores ambulantes que vendian leche que traian de los ranchos además de venta de carbón. De hecho algunos pasaban la noche en alguna de las posadas que habia en el callejón de esta manera descansaba tanto el vendedor como las mulas que acarreaban la carga.
En aquella época esta pequeña calle no era igual que la puedes encontrar ahora, no dejaba de ser como cualquier otra calle de Morelia. Algo que le hizo destacar más adelante es que a la entrada del callejón abrió una fábrica de jabón, esto hizo que llegara agua corriente y fuera la única ronda en tenerla.
En un tiempo más cercano, en concreto en 1965, el pasaje recibio una completa remodelación en la que se puso en las fachadas cantera de color rosa, jardineras, alumbrado publico y las fuentes.
Esta reforma fue inaugurada por el presidente de aquel momento Gustavo Díaz Ordaz. Este rincón tan bello comenzó a ser un buen lugar en el que los enamorados les gustaba pasear y decirse palabras de amor. Cualquier momento del día es buen momento para empaparse del amor que fluye en el callejón aunque recomendados que el anochecer no te dejara indiferente. Además este lugar romántico aparece en los versos del «Romance de mi Ciudad», obra escrita por don Lucas Ortiz.
Así que si tienes la ocasión no dejes la oportunidad de visitar este lugar a ser posible bien acompañado y con algunos pensamientos llenos de amor para compartir con tu pareja, además de un candado con vuestros nombres.