Amplia colección de máscaras
El Museo Nacional de la Máscara está ubicado en una majestuosa casa neoclásica del siglo XIX considerada como monumento histórico. Alberga una colección de máscaras que representan las múltiples tradiciones y los personajes históricos y simbólicos de la cultura popular mexicana.Este museo está considerado entre los mejores del país por la rareza y cantidad de su colección, que se compone de cerca de un millar de máscaras procedentes de casi todos los rincones de México.
La muestra se complementa además con una sencilla serie de máscaras asiáticas, principalmente de la India, y 25 vestuarios de danza.
Magia y tradición se entremezclan con el ancestral simbolismo de ritos ya perdidos en el tiempo, y suplantados por nuevos y complejos sincretismos en los que el mandato del ingenio popular se hace presente en cada falso rostro.
Es una institución dedicada al estudio, promoción y difusión de la máscara mexicana como un significativo producto cultural, aspira a presentar lo más característico de la máscara y las innumerables tradiciones que representan en el mundo. Así mismo vincula su simbolismo con las diversas manifestaciones del arte.
Exhibe una amplia colección de máscaras mexicanas donadas en su gran mayoría por el Ingeniero Víctor José Moya Rubio, gran coleccionista de arte popular mexicano.
La colección original constaba de 750 piezas, que a través de diferentes donaciones se ha incrementado hasta aproximadamente 1200, las cuales representan a las múltiples tradiciones y a los personajes históricos y simbólicos de la cultura popular mexicana.
Los grupos étnicos presentes son: coras, huaves, huicholes, mayas, mixtecos, nahuas, otomiés, pames, purépechas, seris, tarahumaras, tarascos, zapotecos y tenek.
El inmueble que lo alberga fue construido como casa habitación en 1898 por el ingeniero Enrique Campos y remodelado en 1981 por el arquitecto Fernando Valdez Lozano. A lo largo de los años albergó a las oficinas del Ministerio Público Federal, la Liga de Comunidades Agrarias, el Consejo de Minería y Telégrafos Nacionales de México, hasta que el 4 de marzo de 1982 fue inaugurado como museo.
Está clasificado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia como monumento histórico. Cuenta con dos salas permanentes dedicadas a la máscara prehispánica y la máscara mestiza, respectivamente, y una sala temporal.
En sus instalaciones se llevan a cabo conciertos, conferencias, presentaciones editoriales y concursos de arte. Ofrece talleres y cursos de pintura para niños, talleres y cursos de cartonería, máscaras y alebrijes para niños, jóvenes y adultos, así como visitas guiadas.