Lugar de tradiciones y cultura
El pueblo de Tlalpujahua se presume hospitalario, cálido y amable con el turista, al llegar a su pequeña plaza, se puede apreciar la cotidianidad del lugar, su gente y sus costumbres, Tlalpujahua es sinónimo de artesanía de vidrio soplado y de barro cocido, de antiquísimas calles empedradas que acentúan los trazos sinuosos del mágico poblado.Su entorno te envuelve en su espléndida tranquilidad y bello paisaje montañoso, andar por sus calles es rememorar la historia de la minería de oro y plata, es evocar la figura heroica de los hermanos López Rayón, de hombres valerosos que pugnaron en épocas independentistas.
Es un pueblo mágico, minero y artesanal, proyectado entre montañas y bosques, de aire colonial con sus fachadas de cantera rosa, reconocido por la elaboración de esferas, este hermoso Pueblo Mágico te espera para que camines entre sus calles empedradas y a tu paso te susurren su historia minera, su arquitectura y su majestuoso santuario te llevarán a una época mística.
Su horizonte coronado por montañas, vistas increíbles al cielo, techos de rojo antiquísimo, piedras que dan forma y textura a sus construcciones y arterias viales, aire puro, bosques llenos de vida, vetas de oro y plata que aguardan en sus entrañas, gente amable y hospitalaria, tradiciones y cultura, son elementos que cincelan la identidad y nombre de Tlalpujahua.
Tlalpujahua se asienta en un territorio tan hermoso y rico que fue codiciado desde los tiempos prehispánicos, se dice que los primeros pobladores fueron los mazahuas que estaban en permanente conflicto con los dos grandes imperios que llegaban a la zona: los tarascos y los aztecas, ambos querían tomar posesión de estas tierras.
Este pueblo conserva sus raíces prehispánicas que se ven reflejadas en sus artesanías de cerámica, el tallado en cantera y su colorido arte plumario, te hará disfrutar de sus hermosos atardeceres mientras los aromas del bosque te inundan los pulmones, en primavera los naranjas y negros de las mariposa monarca, alegrarán tu vista, la tierra del tezontle es un lugar que sorprende por su enorme cantidad de atractivos, la amabilidad de sus habitantes, el amor por su tierra y su esfuerzo creador; por algo se llama a sí mismo el pueblo que se negó a morir.
Los alrededores de Tlalpujahua emergen como sitios ideales para la práctica del ecoturismo, a últimas fechas, agencias y empresas de servicios turísticos han comenzado a desarrollar profesionalmente el aprovechamiento de las bellezas naturales de Tlalpujahua, los dos principales ejemplos son el Parque Nacional Hermanos López Rayón y la Presa Brockman.